
El niño con el pijama de rayas es un pequeño libro para niños y no tan niños cargado de sentimiento. En 2008 saltaba del libro a la gran pantalla la historia de Shmuel, un niño judío recluido en un campo de concentración nazi, que encuentra al otro lado de la alambrada a su único amigo.
Sinopsis de El niño con el pijama de rayas
Bruno, al otro lado de la valla, resulta ser el hijo de uno de los generales encargados de supervisar el campo. La amistad crece entre él y Shmuel a pesar de ser desconocidos y de tener tan poco en común. Lo único importante es que son niños, que en ellos no vive el horror y que ninguno entiende el mundo al que los han abocado.
El libro original, convertido al poco tiempo en best-seller, fue escrito por John Boyne y publicado en 2006. Supuso un éxito de ventas debido a la lacrimógena historia que contiene algunos de los elementos más susceptibles de “tocarnos”: la infancia, el Holocausto, la amistad y la inocencia. Si a ello le añadimos el contexto histórico, como hiciera La vida es bella, resulta un cóctel psicológico con el que es difícil no emocionarse.
Poco después se estrenaba su adaptación cinematográfica de la mano de Mark Herman, cineasta que se estrenó en los 80 y que hasta la fecha no ha repetido producción. Entre su reparto se encuentran Asa Butterfield, David Thewlis, Vera Farmiga… Esta cinta resalta por su más que notable fotografía, dirección y guion, y está entre las adaptaciones más dignas de la última década.
Tráiler de la película
Valoración
Podría tratarse de una película para ver en familia, pues aunque presenta un tema duro, no hay que obviar que los niños aprenden Historia con agradecimiento si se les presenta desde una óptica cercana a su perspectiva. El mejor modo de hacerlo es con cuentos y fábulas, y si además están tan bien adaptadas a la narrativa audiovisual constituirá un buen título para acercarse al pasado desde una perspectiva humanista, educando en valores.